Las bodas campestres se han convertido en una de las tendencias favoritas de muchas parejas que deciden crear un ambiente único con el mágico entorno de la naturaleza. Adaptar cualquier catering a este tipo de bodas es fundamental para garantizar el éxito de la celebración.
A la hora de organizar un catering para una boda campestre hay que tener en cuenta la decoración. Esto incluye mesas decoradas con flores silvestres, frutas, y cualquier otro tipo de elemento que recuerde a la naturaleza.
Las sillas y mesas de madera, son la opción perfecta para dar ese toque rústico, típico de las bodas campestres, y en cuanto al color de la mantelería, los colores verdes, amarillos o beiges, darán el toque final a una boda en plena naturaleza.
Una boda en la naturaleza
Si los complementos y la decoración de un catering para bodas campestres forman parte importante de la celebración, no menos importante es la elección del menú, el cual también debería adecuarse a la temática.
Una opción adecuada para una boda campestre es el buffet, orientado siempre a ofrecer productos naturales y alimentos sencillos de preparar, tal y como si se tratara de un picnic, pero con el cuidado y la calidad de un servicio de catering.
Una mesa de bebidas con zumos de diferentes variedades, una mesa con degustación de diferentes tipos de frutas, o una Candy bar (mesa montada y decorada con golosinas y dulces variados), son pequeños detalles que harán de la celebración de una boda campestre todo un éxito.
Lo ideal es elegir productos típicos de la zona en la cual se celebra la boda, dulces artesanos y platos clásicos del lugar, al igual que las bebidas. De esta forma la boda campestre tendrá un toque más personal y auténtico, que el catering sabrá plasmar en cada uno de sus servicios.
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